Feliz dos mil once, mi querido lector, espero que lo estén pasando como merece su humanidad y que cada día de este año sea mejor que el anterior.
Una vez cumplida mi saludo cursi, pero sincero. Porqué siempre lo he manifestado que lo cursi es cursi cuando no te lo dicen a ti.
La buena gente chilanga que oye mis quejas y va a mis fiestas no sabe cuánto le deben mis emociones y mi vida a la ciudad de la torta de tamal. Es una deuda cada vez mayor, pues desde mi primer día nunca me he querido desaparecer. Y como no pedí vacaciones este año nuevo, mis huesos incrustados de nicotina se quedaron a festejar en esta generosa tierra.
La fiesta fue organizada por una gran amiga, de esas que tiene una popularidad como la tenía Siempre en Domingo, el día que lucerito nos deleitó con un agradecimiento que salió de lo profundo de sus intestinos. Quiero decir demasiada alta.
Yo medio me puse las pilas para recibir en el centro de adicciones casa de la risa a todos “mis invitados”, dos charolas a reventar de ese suculento majar que le denominan los que saben jamón serrano, yo le digo momia de puerco. Acompañados por un pedacito de melón, que con toda la torpeza de mis manos fueron elaborados con el cariño que se merecen.
La mesa la dejé finamente repartida con botellas de Ron, Whiskey y Tequila. No obstante de eso me entró el artista que llevo adentro, y elaboré un coqueto centro de mesa, hecho con un motón de velas rodeando de una botella de vino tinto.
Cuándo el panzón marcaba las 8 de la noche, no había llegado nadie, y tenía este sentimiento en las tripas que te dice que pasa ni no aparece nadie. Lo bueno fue que 15 minutos después, llegó una señora cargada de comida, tacos de guisado de todos los tipos y ahora si me di cuenta que la fiesta no era mía, pues invitados míos fueron 6 de los cuales me cancelaron 5 y que la anfitriona de la fiesta es y será mi amiga,
Antes de las doce, llegaron amigos en común lo cual lo agradecí machismo, unas 25 personas a todas la conocía. Las doce y el montón de abrazos, quemamos deseos, unos cuantos locos sacaron la maleta a la calle, a dar vueltas por mis hectáreas, unas modestas luces de véngalas chispearon al redor de dos grandes segundos. La cosa hasta ahí, todo bien.
Pero después de las doce, ahora si las cosas cambiaron el timbre de mi casa, no dejó de sonar, cada minuto entraba un nuevo personaje, querido lector no hace falta hacer mención que en menos de dos horas su casa que es mi casa, estaba a reventar de personas.
De las cuales en mi vida las había visto y posiblemente no los vea otra vez, me lo pasé muy bien la verdad, las personas extrañas son un pasa tiempo de este tan de usted y de nadie Sexy y Barrigón. Y fue una gran fiesta.
Fui testigo de muchas críticas de estos personajes para mi linda casa, que le hacemos yo estaba siendo extraño en el ambiente artístico. Dos señoritas una muy borracha se quejaron del baño, una linda mariposa se quejó de la falta de bebidas coquetas, un werito se quejó que le habían robado su botella de Whiskey (ese fui yo).
Cuál fue mi sorpresa que dentro de todos el mar de personajes, me encontré a mi invitado con su guapa novia, la cara de los dos fue lo mejor de la fiesta, pues la expresión de su cara. Me recordó la cara de E.T. cuando bajó de la nave, como diciendo maestro ¿Dónde estamos?. No dejé de reír, pero fue bastante ameno encontrar una cara conocida en mi casa, ya me estaba sintiendo afanado en la fiesta.
En fin mi querido lector, esto es el inicio de mis narraciones, porque el montón de historias que me pasaron en esas horas, las platicas y sobre todos los nuevos personajes en mi personal mundo de maravillas. Me ha dado material para este blog por todo el año.
Me despido para no agrumar. Buen inicio de semana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario