me ha gustado saludar quitándome el sobrero aunque eventualmente me lo roben.

Estaba radiante, por dormir en casa de mis papas, teniendo en cuenta que adoro Guadalajara pero esta vez la visite por cuestiones personales.

Desayune mis tacos de barbacoa que son los más venerados y aunque suene exagerado es verdad Guadalajara es una ciudad con muchas niñas guapas las cuales siempre me ha gustado saludar quitándome el sobrero aunque eventualmente me lo roben.

Resumiendo me lo pase muy bien, hasta hable de cosas peligrosas con aquel amigo que le robe a la novia. Qué puedo decir fui tan culpable con Judas, pero realmente lo haría otra vez no hay peor arrepentimiento que el “qué hubiera sido”. No me gusta pero es lógico que pase. Me justifico con reserva los motivos de mi actuar. Pero siempre me da gusto pasar un buen rato en Guadalajara así, acompañado de grandes personajes del pasado. Y en el mejor de los casos unos siguen siendo del presente.

Será que entendí por primera vez que el tiempo que pasamos en esta tierra es muy poco para pasarlo odiando, darle vueltas a la páginas del libro de los malentendidos de los egos dolidos y de todas aquellas cosas que se encargaron de robarme la sonrisa alguna vez. Es parte fundamental de mi receta de vida. Intentó aprender a saber a quién recordar y a quien olvidar. Parte de mi no cambió, ni habrá de cambiar. Mi alrededor parece que se desmorona como un castillo de arena a merced del vaivén de las olas. Yo mantengo estos síntomas de locura inestable.

Y aunque puedo presumir de poco, tengo por ahí el corazón loco que hace la vida más vivida. He respetado el mandamiento de no hacer perder el tiempo en cuestiones del amor. No será una cobardía de mi parte para evitarme el temita este de que me rompan el corazón otra vez. Espero que no lo sea y que el destino no mantenga el timón de mi vida, porque lo lleva en dirección contraria en túnel del amor. De todo lo demás no hay nada malo que haga sentir una minuto de lastima por mí.

En deshoras me atrabanque de la estúpida melancolía, será que extraño mi tapatilandia, mis problemas cotidianos de ahí o será que estamos iniciando este maratón de vida, sea como sea espero tener 6 meses nada más.

Se despide este tan de usted y de nadie Sexy y Barrigón.