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Llevaba mucho tiempo sin sacarme de las entrañas las palabras y es verdad que me han costado mucho, porque yo no sé hacer bienvenidas, ni despedidas. Pero la cosa no es ponernos cursi, espero que disfrutes el fascinante mundo de este Sexy y Barrigón. (Si no disimula.)







miércoles, 28 de diciembre de 2011

Ataque de pánico.




Mi barca pasaba por una tormenta de ideas, todas tendientes a la desolación. El miedo se apoderaba de la noche. Estaba perdiendo mi dopamina, esa droga legal que hace que creas que todo está bien cuando en realidad, no todo está bien. El eco de la soledad se multiplicaba como voz en parlante. No me gustaba nada a donde me estaba llevando el miedo. Y claro aquí viene otro ataque de pánico. 

Hiperventilación, y un bombardeo de imágenes de situaciones de penumbra. Me sentía triste, me sentía solo y suponía que todo salía mal. Ya no quiero buscar la belleza o el amor, no quiero nada que no sea una situación solida de autoestima. Estaba sintiendo la humillación mezclada con el sentimiento romántico de un triunfo titánico.  De carne débil esta hecho mi cerebro, se asusta con problemas que se puede solucionar. Vamos a meternos a la cama y saber diferenciar entre problemitas y catástrofes. Los primeros los puedes solucionar las segundo te tocan y no hay nada que se pueda hacer.

Me encanta la forma de hacer un pánico, en una situación para tranquilizar las señales de alerta del futuro, que se tarda en llegar. Mientras todo a mí alrededor parece romperse, me acuesto en la cama a escuchar el sonido de todo al chocar. No hay enojo ni tampoco tristeza. Podría tener todos estos sentimientos contra los que me vendieron un estilo de vida muy ajeno a lo que yo hubiese querido para mí. Suena poco probable solucionar mi poca autoestima culpando lo que no puedo cambiar y sé que mañana me despertare encontrando que mi vida ha cambiado. Aunque siga todo igual, me doy cuenta que cambie en la noche. Se todas las respuestas, pero siempre estaré equivocándome, solo estaré confundiendo o confundido. ¿Por qué es tan difícil darse cuenta de una verdad tan simple?. 

Una problemática, un espíritu, un montón de pendejadas en mi haber, y el tiempo que queda para vivir haciendo lo que me gusta hacer.

Este relato de pánico va con mucho cariño para mi amiga la Sosa.
Tengan bonitos últimos días del año.

1 comentario:

  1. HannaTorres Rojano Anael ntk... lic. ya leí su página, esta muy interesante creatividad y originalidad... sus palabras expresan la busqueda interna de su ser, llegar a la divinidad¡¡¡ ....gracias por compartir su expresion... me late¡¡¡¡

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