ACOMÓDATE

Llevaba mucho tiempo sin sacarme de las entrañas las palabras y es verdad que me han costado mucho, porque yo no sé hacer bienvenidas, ni despedidas. Pero la cosa no es ponernos cursi, espero que disfrutes el fascinante mundo de este Sexy y Barrigón. (Si no disimula.)







lunes, 30 de julio de 2012

Vestida para tortaer.


Mi cuidad capital, tiene muchas chuladas cotidianas. El metro es un lugar donde pasan y pasaran un sinfín de historias que deberán guardarse en el anecdotario nacional. Unas historias de tintole trágicas como aquel pobre hombre de Jalisco visiblemente afectado de sus facultades mentales que una mala tarde en el metro banderas saco su revólver y ejecuto a personas. El hecho detonante no lo dejaron pegar publicidad a favor del medio ambiente.  
También la leyenda del homicida serial que tiraba a pasajeros justo cuando el tren llegaba a la estación, así mismo el montón de personas también afectadas de sus cabales que deciden tirarse al metro como medida de acabar con su miseria. Desconozco que proceso mental se tiene que tener para decidir poner fin a tu existir siendo arrollado por un tren, se juro se sufre más. 
De estación en estación uno es testigo del galopante comercio informal del mexicano, por diez pesos promedio te haces merecedor de un sinfín de productos apócrifos, materias primas que por el precio que la venden seguro son o robadas o caducas. Y todo pasa en lo vagones a la vista de todos y de la autoridad capitalina. 
También como lo he narrado ya, el último vagón del metro ha sido denominado como la “cajita Feliz”, en donde la comunidad homosexual se da sus agarrones, de ligue o pagados.
Pero de los que nos ocupa el día de hoy de los famosos y nada agradables areguntones de camarón, práctica sexual muy solicitada por mi querido pueblo mexicano. Esta táctica sexual que ya es considerada como delito, consiste en arrimar los genitales masculinos en el cuerpo de una pobre usuaria del sistema colectivo metro.  Fueron tantas las víctimas, que nuestro gobierno deicidio separar mujeres de hombres, como si esto fuere la solución. Supongo que sería más efectiva educar a los hombres a respetar a las mujeres, que estar protegiendo a las féminas de los predadores sexuales. 
En fin cuenta, otra leyenda que me encanta contar, que un sujeto de estos con sobre peso, ocurríosle vestirse de mujer. Su fin era estrictamente sexual. Pues vestido de mujer podría acosar a las señoritas viajares en los primeros vagones.   Y así las cosas abordo el vagón exclusivo de mujeres y arrimó su miseria de genitales (dicho por las testigas del crimen pasional) a las señoritas. Pero cuál fue su sorpresa que las féminas se le abalanzaron y no por ser carita, si no se la abalanzaron a golpes. Tal fue la golpiza que le pusieron que la policía lo rescató de aquella muchedumbre de estrógenos que lo querían más que muerto por haber metido mano. 
Al ver la prensa nacional me encontré la noticia en primera plana, la comparto para que tengan un poco de risa de tarde de lunes. Y cuidado con los vestidos para tortear.


2 comentarios:

  1. Jajajaja........para la próxima vez que salgas a pasear en metro cuida bien tus pertenencias Jajajajaja

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  2. jajajajaja un verdadero clásico de las portadas del Metro, junto con el "tan. taran. tan. tan" o "no freno ni tantito". Saludos!

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