En la ciudad de la torta de tamal, se vive en taxi. La verdad
de las cosas es que son baratos, no sé si sea suerte o estadística, pero a mí
jamás me han robado en uno. Bueno, uno que otro taxi pirata me cobrado un mucho
de más y les he regalo un par de celulares. Pero eso es por mi estupidez de
dejarlos ahí y pagar de más, es por no discutir unos pesos por mi integridad física,
vamos ellos manejan y dejan mi humanidad a veces tambaleante integra fuera de
mi casa. Cuánto vale eso, seguro menos que ser víctima de una navaja con oxido,
o un asaltante de a pie, novato con las pistolas o los pedazos de automóvil encajados
en mi piel.
Siempre trato de hablar con el joven conductor, de política,
de mujeres, de los gays, de sus historias de taxi. Pero a partir de hoy, juro
solo decir a donde voy y cerrarme el pico. Al abordar el taxi siempre me fijo en la cara
del conductor, para saber si tiene pinta de mañoso, así también me fijo en lo
limpio del taxi. Para mí son factores claves para viajar tranquilo, en este caso
el joven conductor cumplía con todos mis pequeños requisitos.
Un buen consejo de seguridad para taxistas y para el público
en general es abstenerse de poner fotos familiares a la vista de todos, pues están
dan indicaciones de donde los extraños pueden hacernos daño. Por lo mismo, al
fijarme que mi conductor tenia la foto de una regordeta sonriente en su tablero
y para romper el hielo, le recomendé quitar la foto por su seguridad. El agradeció
el consejo, pero me explicó que la de la foto era su hija y que se la mato un psicópata
el 24 de diciembre. La mató a golpes para después tirarla por una ventana.
Una sensación de dolor en mi pecho, más el sentimiento cutre
de la pena, por no medir mis palabras y andar dando consejos donde nadie me los
ha pedido. Pero el padre tenía ganas de desahogar su alma con el Sexy y
Barrigón preguntón. La historia más o menos es la misma tragedia de amor psicópata,
“La gordita murió por amor” me decía el padre con el nudo en la garganta y los
puños aferrados al volante, como queriendo que se trasformara en el cuello de
su ex yerno asesino.
Cómo se puede aliviar el dolor de un padre o un madre que
entierran a su hijo, ha de ser lo más fuerte del mundo. Estamos programados para
enterar a nuestros padres no a nuestros hijos, de hecho no hay un término para
el que pierde un hijo, hay huérfanos, hay viudos. Pero el diccionario no puede
definir a la pobre alma que tiene que acudir al velorio de su hijo. Supongo que
es el dolor más fuerte en la vida.
No puedes decir nada útil en estos casos, por lo tanto regalas
un silencio compartido. Pero el taxista quería venganza. Entre trafico me comentó que gasta su tiempo
libre y sus recursos en perseguir al que enamoro a su hija, para después
matarla de la forma más cobarde. No soy partidario de la justicia por propia
mano. Tampoco creo que el coserle la cara a puños al piscopata haga que
encuentre alivio a su dolor. Una vida por otra vida ha sido el tratamiento a lo
largo de la humanidad y las cosas no han cambiado. Por lo tanto considero inútil
la ley de talión.
Pero puedo sentir la
rabia e impotencia que abordó también aquella noche ese taxi. ¿Le dices que lo
perdone?, ¿Qué tenga fe en la justicia divina o humana?. Yo le page lo doble
que me marco el taxímetro para ayudarlo en su búsqueda. Espero no haga una tontería,
pero no soy quien pueda impedir una legitima he inútil vendetta.
Claro el culpable está prófugo, el papá haciendo lo posible para
vengar la muerte de su hija tratando de convertirse en lo mismo que le quito a
su hija, pero con causa justificable. Homicidio al final, privación de la vida.
No sé porqué dicen que venimos de los changos, ellos no son tan malos como
nosotros.
La justicia humana caminado lenta y pesadamente, sin ser alguien
que organice marchas tumultuarias para exigir justicia, la historia del taxi
quedara muy seguramente en impunidad o en estadística. En mi país me duele decirlo, pero los pobres
son noticias cuando matan, cuando están vivos son mera estadística y cuando los
matan también son parte de un informe de gobierno y nada más.
Pero la culpa para mí la tiene el amor. Porqué se cegó ante las señales que dan los que pierden la calma y golpean a una mujer, que pasó por la cabeza de la gordita, qué el amor podría cambiar la psicosis de un misógino. Que tan poca autoestima para depender sentimentalmente de un mandril. Porqué no lo mato en su legítima defensa. No puedo dejar de sentir coraje hacia ella. Deseó de todo corazón la historia termine en buenos términos. Pero por piedad humanos fíjense bien en donde ponen su corazón. Ya lo puso una amiga en su red social “Cualquiera que mate el amor dentro de sí mismo, es capaz de cualquier atrocidad... Quien golpea a lo que ama, no ama de verdad, porqué amar a quién no te ama. Despierten de una vez.
En el inter que me despido, exijo justicia para todas las féminas
victimas del amor y de la estupidez. Castración para el que mate a una mujer.
Miriam Fernandez Me has dejado de piedra, con la piel enchilada, y con una sensación interna muy desagradable.... Uffff
ResponderEliminarALe Pinya Bojóяquez leì el pasado, pero qué bueno que compartiste este. Quiero agradecer públicamente que te tomes la molestia y tiempo de poner estos posts de tus posts en mi muro, jeje =) así se difunde más y me recuerdas entrar =)
ResponderEliminarMarcela Orozco
ResponderEliminardon ramon me gusto bastante este blog, yo quisiera ser diputada o senadora solo para implementar una ley en contra del matrato a la mujer, se de casos que van poner una demanda por golpes y no les hacen caso porque las heridas no son graves, quiere decir que tienes que llegar medio muerta para que las autoridades tomen en serio tu caso y puedas ingresar una demanda, ésto sinceramente es muy grave, tiene que haber un cambio. MUY BIEN POR TU BLOG
Marina Hernández Rubio
ResponderEliminarLa cd.d la torta d tamal tiene extraniament gente mas hambrienta d ser escuchada q d cualkier otra cosa!si estas dispuesto a escuchar las historias fluyen en cuanto muestras un poco d interes o curiodidad,aunk no se xke ultimament nos han tocado escuchar historias atroces d taxistas werito d mi alma!algo deberemos hacer respecto a ellas supongo!:s!x lo pronto,como todo buen penalista esta historia la narras extraordinariamente dsd un punto d vista con el relativismo necesario q debe siempre llevar la historia d un crimen...los actos no son nada sin las circunstancias q lo rodean!dificil d entender para los "simples mortales"!pff!.La historia,como varias,es terrible...la narracion y tus opiniones me gustan mucho!tq!bisous!;)
Vlinder Bakker wow crudo comentario pero tristemente la sociedad es asi, no diria que estaba cegada de amor, diria que tenia terror a las amenazas del hombre, el ser humano no se guia por los instintos a diferencia de los animales, por el mas torpe que sea son mas sabios que nosotros.... mira la pelicula mi nombre es khan es una historia magnifica ..
ResponderEliminarMiEl Miel
ResponderEliminarVaya las historias de taxi son de lo más increíble, desde la mas simple hasta la más educativa o nostágica como en tu caso... Y hablando en referencia a la muerte por amor de la gordita, pffff pues habrá que explicar bien que orilló al hombre a cometer tal atrocidad, sabes de pronto las mujeres también tenemos la culpa de las cosas que nos pasan, es muy injusto culpar sólo al hombre, nosotros que sabemos que la gordita no lo tenía ya hasta la madre y ella como buena gordis romántica no lo soltaba ? ja ja ja ja, bueno se me viene mil historias a la cabeza que pudieron pasar; con esto no justifico ninguna muerte, pero tampoco culpamos por algo que no nos tocó vivir !... Gracias por compartir !!