Hoy es uno de esos días en los
que quisieras ponerte un letreo en el pecho que anuncie que no estás para
nadie. Un maldito mal humor galopa por todas mis venas. No hay motivación, lo
que realmente lo que quiero es esconderme en el sillón retacado de pelos del
perro y doparme con televisión.
Por más que quise escribir algún
tema bonito, escupía pura miel con fecha de caducidad ya muy pasadita. Ni
siquiera mi lesbiana interior quería escribir. Supongo que ha de estar en sus
días. El saico está pendiente de las noticias para ver si atrapan al Chapo Guzmán,
recapitalizando sobre el tema, deberían de poner más policías en las ferreterías
para que los niños en situación de calle no puedan comprar solventes para
drogarse o fundirse el cerebro, según como se quiera ver. Mi jeli esta perdido en las fotos de la novia
del mundial jugociandola, el trabajo lo termine rápido y me hubiera gustado
perderme un poco más en las leyes municipales del servicio de agua potable. Pero
las musas no hablan, la memoria me falla y realmente lo que me preocupa es cómo
pasar las horas que quedan de este puñetero martes 13 que se quiere disfrazar
de viernes. Vamos poco a poco, minuto a minuto.
Fue tanto el astió que redacte un
anuncio calificado para ver si suena un poco más interesante mi persona porqué
el día de hoy quisiera estar en otros huesos y no en los míos.
Soy un caso perdido, ni alto, ni fornido, ni
formal. Rubio cenizo seboso es mi cabello. Ya lo saben, mi sonrisa es timidona
por la nicotina en mis dientes, tengo cuerpo de perro parado, cavernícola
ocasional, una alma rota, caminado de pato con polio, aferrado a muchas
historias sin final feliz, buscando absurdos por las calles, personalidad
adictica. Soy una mala biografía no autorizada por el autor. Pero al final eso
soy y no me parezco a nadie. Mi locura viene en el paquete.
Lo de los cuentos que cuento yo
se me complicó no encuentro un final adecuado para el proyecto infantil que
atiendo cada que me dan ganas de escribir para menores de edad. Estoy en esa
parte en la que tienes que decir ya no quiero estar contigo pero no sé bien
como decírtelo para hacerte creer que eres especial, pero para alguien más
ahora no eres especial para mí, quiero ser soltero.
En fin les comparto este hastió
que no quiere salir de este cuerpo trabajador.
Cuídense de los finales felices
son muy tediosos y choteados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario