Yo soy re bueno para perder cosas, falta ver la cantidad de
números celulares que he tenido, carteras, llaves, dinero, automóviles y otros
bienes sentimentales. De todas las cosas que he perdido la que más de duele es
haber perder tiempo. Pero esto es lo que más he perdido últimamente. Creo que me falta astucia y paz mental.
Uso demasiadas palabras pulso cortantes e ideas obtusas
contundentes. Pero siempre estoy volando incluso con las alas rotas. Pero soy
un tipo de verdad, un fugitivo de la vida en pareja, pero al final es lo que
hay. No espero nada, pero quiero solo lo
mejor.
Para vivir a lo grande, solo me hace falta pasión inmensa que
no te quepa en la sangre. Y aunque he sido bendecido con las faldas que se caen
ante mis ojos, quiero estar en los brazos del amor del alma de mi vida. Sin
prisas, pero si calmas. Ha de estar esperándome en una biblioteca, un
consultorio dental o una ciudad extraña. Qué se yo. Tampoco le tengo miedo al
morir sin pareja, ni pequeños chupasangre que con una mirada te matan, y al cabo
de los días te nombran Papá.
Agradezco a pesar de lo vivido, me dejé querer por mujeres lindas
y perversas. Ahora solo les pido me permitan seguir escribiendo con el corazón
entre los dientes, con la falta de adiestramiento en esta sagrada vocación de
escribir según los eventos cotidianos inspiran.
Sin dudas ni reproches, olvidando tomar determinaciones,
viendo más hechos que palabras, pero también escuchando lo que me tienen que
decir. Aunque no les crea todo.
Hoy estoy como quería estar, con el logro de haber escrito
más o menos trescientas noventa y cuatro horas con disciplina precisión y
sinceridad. Me gane un lugar por ser ingenuo y atreverme a sacar a la luz los
demonios y los ángeles de este tan de usted y tan de nadie Sexy y Barrigón.
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gracias por eso y por todo lo demás también.
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