Al ritmo de la madrugada ya cuando el día sábado empieza a
clarear que normalmente no es laborable, es normal llegar a tu casa después de
una fiesta y antes de entrar, te haces el auto cateo en busca de tus
cosas personales. Bolsa derecha celular ok ok muy bien, bolsa izquierda
papelitos y más papelitos, servilletas y propagandas para el próximo bar. Bolsa
nalga derecha cartera. A esas alturas de la madrugada solo la quieres sentir,
jamás ver lo que llevas a dentro pues el recuentro de los daños económicos
siempre se deja para el día anterior.
Checas tu celular para dos cosas una para
ver si lo tienes, y para saber si no has mandando mensajitos inoportunos o
llamadas imprudentes. La cosa es grave cuando acabas de terminar una relación
amorosa o andas medio con ganas de besos. Por qué algunos borrachos creemos que
las mujeres son vampiros que no duerme y que están gustosas de recibir llamadas
a las 4 de la mañana. Indiscutiblemente
cuanto te contestan dices “¡hola cariño¡ ¿Estás despierta?”. A que pregunta tan
idiota. Qué esperas una respuesta de
“nombre como crees, si estaba esperando esta llamada tan romantica vente a que
te de unos besos”. Maldito alcohol nos hace creer en cuentos de hada. Lo que normalmente
recibes es un par de palabrotas por andar hablando a deshoras.
Si después del bar, antro, cuchitril o reunión no pasaste
por unos gochos, tacos, hamburguesas o cualquier otra cosa servida con el
cariño y la higiene que acostumbra la industria que vive de los borrachos. Te
haces medio chef y te preparas cada cosa que al día siguiente, ves tus recetas
y te provocan ganas de mmmm, pues bueno de no hacerlo otra vez.
Es bueno dominar las maltas, a mi el Whiskey me trata bien.
Qué podemos hacer son las cosas de la vida. Yo me he trepado en el árbol de las
borracheras y me he dado contra todas las ramas.
Gracias a santo de quién sabe quién, jamás me ha pasado cosa
seria. Bueno creo que lo más serio que
me ha pasado fue una vez cuando una señorita aconsejada por su mala vista, me
comento que le gustaba para mejorar su raza. Yo en plan de broma la tome de la
mano y le comente ok vámonos al baño.
Sobra decir que no paso nada cuando su mirada mejoro.
O la otra vez, que
para evitar unas trompadas en mi rostro, me avente una actuación diga de un
Oscar en el papel del hijo del güero Palma para que los mala copas desitieran
de darme una tumba por andar de chistosito con sus novias.
Muchos don Juanes de
la Ley con ganas de quitarme mis pocos pesos que me han detenido para hacerme
una “inspección de rutina”, pero el
whiskey con el buen humor siempre me ha hecho ser como el señor dueño del
Caliente, un tanto impune.
O en aquel antro
donde le pregunte a un amigo que si estaba saliendo con un travesti, y el pobre
inocente le preguntó a la señorita y me lo recetaron con un par de cachetadas.
Carajo reafirmo mi lema de vida, que solo hay dos estúpidos
para el vino los alcohólicos y los abstemios. Hay que saber tomar.
Saber tomar es todo un arte, jamás dejemos que las
borracheras te impidan cumplir con tus compromisos, cualquiera que sea. Es nada
más un poco de control y dejarle al hígado hacer su trabajo, tomar con pausas,
lento sabe mejor. Ya que puedes sentir como de la nada la cara se te dibuja una
sonrisita. El inconsciente que está muy consiente cuando tomamos se debe educar
para que nos diga todo el tiempo que estamos borrachos y por lo tanto hay que
ser más cautelosos pero también que nos deje ser. Pues cuando uno toma se es
como nos gusta ser.
Ahora vienen las fotos en las fiestas, yo procuro no salir
con baso en la mano por aquello de la posteridad, hombre la discreción siempre
será un virtud. Y a título personal por lo que más quieran eviten salir en su fotos de perfil haciendo señales de pandilleros.
En fin tenga ustedes una
buena semana. Salud dinero y amor les desea este sexy y barrigón.
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